Para disfrutar de todo su potencial aromático, este vino blanco debe ser consumido joven, sin embargo si lo prefiere guardar, hasta 3 años creemos que se vuelve más complejo y elegante.
Consumo: Un vino ideal para acompañar platos ligeros, como por ejemplo pescado a la parrilla, sushi, mariscos (Bivalves), ensaladas y sepia frito. Temperatura de servicio: 8º-10º